miƩrcoles, 17 de septiembre de 2014

CACHOPOS Y ESCALADA











































































El GallardĆ³n no se va a salir con la suya, le han traicionado los de su propio partido con esa ley del aborto que es antediluviana, y al final tendrĆ” que dimitir, tambiĆ©n nos hemos cargado a la Botella, menos mal, por ese lado, esto parece que mejora.

TambiĆ©n mejora por la parte de los empresarios, si la semana pasada muriĆ³ BotĆ­n esta ha muerto el Isidoro, el del corte Ingles, a ver si dejan ya de tener a sus empleados esclavizados como curris...

Si ya saliĆ³ sentencia, ademĆ”s del TS, por la cual se condena al corte Ingles por discriminaciĆ³n a las mujeres al cobrar mucho menos que los hombres.

El fantĆ”stico Contador, despuĆ©s de haberse lesionado y roto en el tour ha ganado la vuelta, vamos campeĆ³n¡¡¡ asĆ­ se hace, y el Gomez Noya tambiĆ©n, ya que no nos dieron alegrĆ­as ni el equipo de fĆŗtbol ni el equipo de baloncesto, pues eso.

Fue el cumple de Miry felicidades por esos 40, ya sabes son los nuevos 20.
La uva del albariƱo ya se estƔ recogiendo, a ver quƩ cosecha tenemos este aƱo, a ver si hay mucho excedente, para ir de furranchos.

Y lamentablemente muriĆ³ una chica escalando en Patones todavĆ­a no saben las causas, porque era raro estaba a toperope.

Tendremos que ir reservando entradas para el preestreno y para el estreno y luego cuando gane el goya otra vez, de la gran pelĆ­cula de todos los tiempos TORRENTE 5.
Si seƱor campeonato del mundo de escalada, y nosotros ahĆ­ abajo, compartiendo suelo con los mejores del mundo, mundial, porque al haber tan poca gente, bajĆ”bamos al parque, donde lo veĆ­an los equipos, y se sentaban todos los escaladores que habĆ­an terminado, allĆ­ algunos comentaban la jugada, otros, dibujaban croquis y apuntaban notas en un cuaderno, el entrenador ruso echĆ”ndole un rapapolvo a su equipo, es decir, vimos todo el meollo. Luego cuando los enanos se cansaban, subĆ­amos arriba, que habĆ­a un castillo hinchable para escalar, un montĆ³n de juguetes, hinchables para saltar, estaba de pm preparado, desde allĆ­, podĆ­amos ver en la zona de concentraciĆ³n a Ondra, a Ramonet.

Que tios, que pasos se marcaban, con una parsimonia, se echaban las piernas por encima del hombro, giraban los tobillos como si fueran de plĆ”stico…tenemos una teorĆ­a a estos los profesores en el colegio no les enseƱaron el concepto de gravedad, lo del 9,81 no lo aprendieron nunca.

TambiĆ©n creemos que a la final pasaban, no el que mejor escalaba porque a esos niveles todos son cojonudos, sino los que en los cuarenta segundos que te dejan para visualizar la vida, era capaz de verla, asĆ­ luego no tenĆ­a que estar parado en un paso analizando cĆ³mo iba a ser los siguientes y por tanto se cansaba menos y por tanto llegaba mĆ”s arriba, pero bueno aquĆ­ puede haber muchas teorĆ­as.

Con lo que mĆ”s lo flipamos, fue con la para escalada modalidad ciegos, como les iban, aparte de cĆ³mo se mueven, narrando los paso desde abajo, apagaron la mĆŗsica, se hacĆ­a un silencio sepulcral, solo se oĆ­an las indicaciones del ayudante, los jadeos del escalador… el que gano fue un japo, que con 28 aƱos le dio una enfermedad degenerativa en la vista, la verdad que el hombre parecĆ­a que tenĆ­a ya su edad, pero que bien lo hacĆ­a y su speaker mejor, un campeĆ³n. En las semis, os juramos que dejamos el Ramonet el primero, pero claro, luego sin nuestro aliento pues na.

Un espectĆ”culo digno de ver, la verdad, y nos sorprendiĆ³ la poca gente que habĆ­a... eso si eran las semis, pero molo ver las semis porque ves a mĆ”s gente escalar, no a los de siempre a los 8 de la final, y vimos como ganaba las finales de paraescalada al gran pirata pata palo Urko…

Y el equipo iranƭ, las chicas con sus paƱuelos casi burcas, uno de los que aseguraban tirƔndole los trastos a na del equipo, con todo su riesgo, que luego te cogen y te apedrean.
TenĆ­amos que haberle secuestrado el domingo, cuando Ć­bamos para la Ƒora a escalar nos lo cruzamos, tenĆ­amos que haberle secuestrado, ahora nos arrepentimos, que nos abriera las vĆ­as, y asĆ­ hubiera perdido... que cabron el Ondra. La final por lo visto fue cojonuda, muchas mĆ”s gente y muy reƱida en chicos, en chicas, la coreana es de otro mundo, aunque sĆ­ que es verdad, que era imposible prĆ”cticamente, despuĆ©s de tres dĆ­as compitiendo hacerse un 8c+ a vista, eso serĆ­a de extraterrestres, lo que pensamos, es que se lo dejaron mĆ”s a huevo a Ondra, porque la puta travesĆ­a esa que tenĆ­an que hacer tan larga, le va mucho mĆ”s a las condiciones de Ondra que de Ramonet. Era curioso ver los detalles, como que cada escalador lleva dos personas para asegurarle, una que va sacando a toda leche la cuerda del cajĆ³n y otra que asegura y deben de hacerlo de pelotas, porque aquĆ­ sĆ­ que se caen, se pegan vuelos de 5 o seis metros. Por ejemplo, los ciego van de segundo, llevan dos cuerdas una va a mitad de via y otra al final, no sĆ© porque pero asĆ­ es, total un espectĆ”culo. A Urko mientras subĆ­a sonaba en todo el pabellĆ³n AC/DC, asĆ­ como no va a ganar. Unas tres mil personas contuvieron la respiraciĆ³n (en directo, y miles mĆ”s al otro lado de la pantalla gracias viĆ©ndolo en streaming en la web de la IFSC) cuando Ramonet tocĆ³ la penĆŗltima presa de la vĆ­a de la final, la misma de la que habĆ­a caĆ­do unos minutos antes Adam Ondra, su gran contrincante en este duelo por el Campeonato del Mundo de Escalada. Pero no pudo ser esta vez, el de Manlleu resbalĆ³ y cayĆ³ en esa misma presa, mientras que el movimiento de ir a coger la siguiente presa le valiĆ³ a Ondra ese plus que le ha dado el tĆ­tulo de CampeĆ³n del Mundo de Escalada. Ramonet venĆ­a muy fuerte, sĆ³lo Ć©l y Ondra habĆ­an hecho top en la semifinal, pero el fenĆ³meno checo se habĆ­a preparado a conciencia el tĆ­tulo que le faltaba en su palmarĆ©s, era su objetivo principal de este aƱo que ha estado mĆ”s apartado de la roca y centrado en la competiciĆ³n y no iba a dejar pasar la oportunidad. Adam Ondra entra en la historia –una vez mĆ”s- pues es el Ćŗnico escalador que consigue el tĆ­tulo de CampeĆ³n del Mundo de BĆŗlder y de Dificultad en el mismo aƱo (ganĆ³ tambiĆ©n la Copa del Mundo de Escalada en 2009 y de BĆŗlder en 2010).

Ramonet se queda pues con un segundo puesto jugando en casa (y con un pĆŗblico totalmente entregado) que le sabe a derrota, aunque sigue con su firme voluntad de ir a por todas en la Copa del Mundo. Nos lo contaba al tĆ©rmino de la competiciĆ³n: "ser segundo no es mi objetivo". En tercer lugar queda el japonĆ©s Sachi Ama.

Jain Kim, reina de la CompeticiĆ³n

Aunque faltaba la Ćŗltima palabra, el resultado en la categorĆ­a femenina era mĆ”s predecible, tras ver la superioridad de la coreana en las vĆ­as de la eliminatoria y la semifinal. Es cierto que la belga Anak Verhoeven tambiĆ©n hizo top en la semifinal, pero tras una esforzada lucha muy distinta al paseo que nos regalĆ³ Jain, que fue prĆ”cticamente descansando en cada presa. La coreana, ganadora de la Copa del Mundo del aƱo pasado (y de 2010) buscaba un tĆ­tulo que se le ha escapado ya tres veces (fue plata en los Campeonatos de 2009, 11 y 12) y no defraudĆ³: subiĆ³ elegantemente toda la vĆ­a, solo en un paso pareciĆ³ esforzarse un poco, y fue la Ćŗnica escaladora que hizo top en la vĆ­a de la final. Fue tal su emociĆ³n que llorĆ³ al alcanzar el top y mĆ”s tarde ya en el suelo, abrazĆ”ndose con su hermano, que es tambiĆ©n su entrenador.

Segunda es la eslovena Mina Markovic y tercera la austriaca Magdalena Rƶck.
Ha sido una emocionante final la vivida en el Palacio de los Deportes de GijĆ³n, con un gran trabajo por parte de los equipadores, que han sabido ajustar muy fino para que las vĆ­as (8c/+ para ellos y 8b/+ para ellas) dieran espectĆ”culo, supusieran un reto y dejaran pasar solo a los mejores del mundo.

Ganadores Campeonato del Mundo de Escalada Dificultad

1 Adam Ondra CZE

2 RamĆ³n JuliĆ”n Puigblanque ESP

3 Sachi Amma. JAPƓN

Ganadoras Campeoanato del Mundo de Escalada Dificultad

1 Jain Kim. COREA

2 Mina Markovic. ESLOVENIA

3 Magdalena Rƶck AUSTRIA

A Cesar y a mĆ­ nos gustĆ³ mucho como lo hizo un Esloveno en las semis, Domen Schkofitz, un crack el tĆ­o.

QuĆ© bien escalan los piratas, que asĆ­ le dijo Ana a los peques, que eran piratas al verles que les faltaba una pierna o que escalaban con una de ortopedia, son piratas... y ellos todo entusiasmados, mira quĆ© alto suben los piratas, yo de mayor quiero ser pirata, ademĆ”s hubo una muy buena organizaciĆ³n no como la del campeonato de EspaƱa que vimos en Madrid, en el parking del parque de atracciones, todo lleno de coches y en medio un roko cutre, no habĆ­a comentarios, nadie se enteraba de cuando salĆ­an a escalar, aquĆ­ todo estaba muy cuidado.

TenĆ­amos una tienda debajo de la casa de Ɓngel de productos naturales y genuinos de allĆ­ debajo de casa vendĆ­a albarcas, las autĆ©nticas, oiga¡¡¡ una ciudad GijĆ³n, muy limpia y cuidada, la vimos poco, lo que mĆ”s el paseo marĆ­timo el bar donde comimos que era estupendo a supercachopos y tortos, pero tenĆ­a de todo y con una pintaza de cojones, estaba hasta los topes pedimos hora a las 14 y comimos las cuatro, pero mereciĆ³ la pena que supercachopada. El sitio se llamaba Tierra astur, el edificio simulaba un barco, por fuera y por dentro muy cuidados todos los detalles.

Que buen rollo, con el Ɓngel el CuƱƔo de Elena, un tĆ­o supermajete, nos hizo de niƱero, todo el fin de semana, tuvimos una suerte con Ć©l, y los enanos encantados, nos prestĆ³ su casa, nos llevo a un sitio que nos pusimos de comer hasta el culo y encima nos hizo un tiempo buenĆ­simo... Que mĆ”s se puede pedir, un poco de bromuro para luego poder ir a la playa sin agobios, y que en vez de un finde semana hubiĆ©ramos estado cuatro dĆ­as...

Menos mal que se vino la hermana y el cuƱao de Helena, Ɓngel, a escalar el domingo a la Ƒora si no, no la encontramos ni de coƱa. La Escuela de Escalada de La Ƒora se remonta a los aƱos cuarenta, cuando los primeros bloques se comenzaron a escalar. En aquella Ć©poca los seguros de las vĆ­as eran clavos caseros cementados y cables de acero. En los aƱos setenta comenzĆ³ a aparecer algĆŗn que otro remache. AsĆ­ fueron apareciendo vĆ­as como “La Enredadera”, “El Pino”, “El Puro”, “Sin Ley”, “El Techo”,…..etc. toda la zona es la vega del rĆ­o del mismo nombre que baja a la playa entre colinas, y a la izquierda hay unos pedrolos de conglomerado. Lo demĆ”s todo llenito de eucaliptos y de helechos, vegetaciĆ³n sin orden ni concierto que se lo come todo.

No sĆ© cĆ³mo llegamos al aparcamiento pero lo hicimos a la primera, luego lo de bajar el coche para recoger a las chicas a la playa era otro tema, casi 30 km porque habĆ­a que sortear todas las colinas y el rio, pero bueno... como estaba muy mal el tema para los enanos se bajaron la chicas a la playa que estaba a doscientos metro, el Ɓngel, se quedĆ³ con nosotros que querĆ­a probar esto de la escalada, no es un tipo de roca muy bueno para iniciarse en esto,, pero Ć©l esta fuerte, le da un huevo a la mtb. TambiĆ©n acercarnos a los sectores, fue pura suerte, vimos unas chapas en el camino, pero esas no son las que estĆ”n en los croquis, luego encima de esa, habĆ­a unos chicos dĆ”ndole caƱa a otro pedrolo, que tampoco viene en las reseƱas. AsĆ­ que como estaban allĆ­ y nos indicaron como acceder allĆ­ nos quedamos, que tampoco Ć­bamos sobrados de tiempo. 3 chapas y reu, por cierto que la reu estaba mĆ”s oxidada y hecha polvo que la duquesa de Alba, daba miedito, y es que el mar puede con todo.

Como se nota la humedad, solo me acostumbre a ella cuando ya nos venĆ­amos, y eso que es el norte, quĆ© cosas, el cuerpo es una mĆ”quina de costumbres de inercias, en cuanto las alteras, baja el rendimiento, le cuesta, pierde esa sensaciĆ³n de bienestar, por eso hay siempre que estar forzĆ”ndolo. (Bueno tambiĆ©n influyĆ³ mucho la cachopada que nos dimos el dĆ­a de antes, que a las 2 de la maƱana seguĆ­amos haciendo la digestiĆ³n).

Puto conglomerado, que escalada mĆ”s trapera y encima con la humedad que cogen las piedras al lado del mar, el salitre, un tacto incomodo, incomodo, era como escalar en la playa de Monsul, un poco mĆ”s compacto el conglomerado, menos arenoso… allĆ­ como no vayas todos los dĆ­as el camino se lo devoran las plantas. Aunque la zona mola de cojones playita escalada en Asturias al lado con grados asequibles, no grado astur… eso si magnesio a tutti. y para terminar nos baƱamos un 14 de septiembre en el CantĆ”brico, flipa¡¡, para que luego digas que no hay cambio climĆ”tico, y despuĆ©s del baƱo y de zamparnos unos bocatas de chorizo a la sidra, que estaban exquisitos y de ponernos morados a beber sidriƱa, se desencadenĆ³ una tormentaza de rayos, agua, truenos y relĆ”mpagos que lo flipas, un seƱor que estaba al lado nuestro lo estaba pasando, fatal, hubo un rayo que cayĆ³ muy, pero que muy cerca de la playa y luego el relĆ”mpago que iluminaba todas las paredes, era bestial, y mientras dos subnormales, en el tĆ©rmino despectivo de la palabra, baƱƔndose, es que hay gente pa to, y todo por culpa de la pistacho, claro mi madre habĆ­a estado limpiando las ventanas esa misma maƱana.

Me sigo sintiendo cada vez mƔs antisocial, me cuesta aguantar y creerme todas las normas sociales, me cuesta cuando hay mƔs de 5 desconocidos a mi alrededor...solo necesito a mi chica, a mi enano, y a mis amigos... bueno y a mi madre. Lo demƔs, te juro que me sobra, sino fuera porque uno necesita un mƭnimo de dinero para esta puta vida, lo mandarƭa todo al carajo, copio a Pati:

“La de cosas que tenemos.

Deshacerme de todo.

Necesito deshacerme de todo.

Sentir que viajo realmente ligera no para las vacaciones sino para la vida.

No expresar para buscar mi expresiĆ³n fuera de mĆ­.

Los objetos me pesan. La ropa me da calor. Lo electrĆ³nico me desconecta. Como con las manos. Camino descalza y esto es lo que soy: un ser en su cascarĆ³n de huesos y vĆ­sceras y piel, no necesito mĆ”s envolturas.

Esta casa con ruedas a veces me sobra tambiĆ©n porque las estrellas brillan fuera y no aquĆ­ dentro y no quiero resguardarme de las estrellas. Solo quiero protegerme del peso de las cosas, del peso de todo lo que creo necesario y me estorba. Siempre me pregunto quĆ© es lo que queda al final, tras un viaje, tras una vivencia o despuĆ©s de un fugaz pero intenso encuentro. QuĆ© deja en las orillas el rĆ­o de la vida, quĆ© no se lleva la corriente ni se desbroza con las rocas ni se desgasta con el roce del agua ni se atrapa en una presa ni se acaba en el mar. AquĆ­ mis 28 “grades Ć©xitos” de este largo verano dejando muchos momentos fuera de este MIX ¡tantos que son invisibles e innombrables! No se pasarĆ”n de moda por mucho que el rĆ­o venga fiero y suenen y suenen. Su sintonĆ­a habita en mĆ­.

1) Corremos por el bosque: Ć©l con esa piel del norte que soporta estoicamente el calor y la humedad. El mar al fondo. Nuestros hijos nos esperan en casa, el tiempo ha corrido y milagrosamente seguimos un poco siendo los mismos.

2) La plaza se mueve mientras nosotras permanecemos inmĆ³viles ajenas a lo de fuera, comiendo y bebiendo durante horas, charlando de todo lo que nos inquieta y nos emociona. Alrededor la plaza suena y se mueve.

3) Miramos el atardecer desde la cubierta y los delfines vienen a saludarnos, con los brazos hacemos un corazĆ³n. Juntos parecemos una tribu majara y divertida y somos invencibles cuando bailamos con el pelo, como pulpos, dando botes en cĆ­rculo… cada cual a lo suyo gracias a la generosidad de M la gorda y al amor que nos une y pata palo y “vivir, vivir lalalalala”… QuĆ© suerte tenemos del pez y la sirena… y de entender “mi gente la vida es una”.

4) Cogen ranas diminutas mientras araƱas gigantes se comen una mantis… Escalo lo mĆ”s alto que me atrevo con la intenciĆ³n de tirarme… y cuando estoy a punto de rajarme voyyyuuuu y me deshago en el rĆ­o.

5) Mermelada de castaƱa, galletas de canela, pizzerĆ­as ambulantes… y una regresiĆ³n a tantos viajes de vidas anteriores.



6) Por la maƱana una crisĆ”lida de cigarra descansaba en la chancla ¿solo el capullo? Al rato la chicharra adormilada nos da los buenos dĆ­as desde el fondo del zapato.


7) Buscar agujeros, regletas, un pie, una postura, controlar el Ć”cido lĆ”ctico y luchar con la sensaciĆ³n de vacĆ­o… ser dueƱa de cada movimiento, de cada pensamiento, de todas las decisiones. En el reposo miro un castillo en la colina que habla de tiempos de cĆ”taros y mujeres luchadoras. Parece que el pĆ”jaro no estĆ” a gusto con mi presencia y se le escapa la lombriz que sobrevive milagrosamente y deja que tĆŗ la domestiques por una tarde.


8) Colgando encima de unas zarzas:

—¡Joder y ahora quĆ©!

—Mami yo preferirĆ­a estar en la furguito.

—¡Y yo cariƱo pero esto es la aventura !

9) Por la ventana, febril, escucho a unos paisanos jugando al mus; la Pepa va ganando y me recuerda a la mujer jugona y pendenciera que ya no espera noticias de mĆ­.


10) Me pide que suba el volumen y juntas cantamos Persona a todo trapo, baila con sus puƱitos cerrados…


11) Hay un paisaje al que vuelvo y me vuelvo melancĆ³lica, parece que mi mirada aquĆ­ se posa en todo lo que una vez fui, lo que fuimos mientras nos trasformĆ”bamos. Vieja, niƱa, joven confluyen en la sierra, arremolinadas como nubes enganchadas a la cumbre, apretujadas como antes de una tormenta, liquidas y gaseosas me llenan el estĆ³mago de mariposas.

12) En el arcƩn crece un girasol enano que ha sabido abrirse paso en el asfalto y no se deja vencer por la soledad ni el alquitrƔn.

13) Ella dibuja una falda movida por el viento, Ʃl hace mi retrato, yo leo Informe del interior, suena Massive attack. Me sonrƭo ante el dƭa que abrirƩ para algo este libro y todos los dibujos caerƔn al suelo.


14) Toc toc toc, uuuuu sssss… latidos, gotas, truenos, viento, frĆ­o, calor… y tus brazos mi guarida.


15) Las gotas de lluvia son tan finas que sobre el cristal hacen un dibujo de arenilla difuminada y tras ellas los niƱos pedalean hacia la calle empedrada, reciƩn alumbrada por dos farolillos.

16) Buscar un sector entre garrapatas y caminos desplomados… oh la aventura de buscar… y las niƱas en su mundo de juego nos producen tanta felicidad que realmente todo es fĆ”cil juntas.


17) La luna llena ilumina rostros queridos y otros recientes que sin embargo se vuelven familiares por la fuerza que emanan. La campana suena y guardamos un respetuoso silencio. Al rato el mil flores llena las copas y los chavalones siguen haciendo de las suyas mientras en la cabaƱa pasiega dos niƱas duermen profundamente.

La casa es un pequeƱo escenario de biombos y mesas desmontables y camas mĆ³viles… Los actores, directores, escritores, bailarinas… hablan de su particular Ć©xito: no intentar nada concreto cuando creas solo expresar.


18) Le he visto crecer y ahora dejo mi vida en sus adolescentes manos. Coloca el grillo, empiezo a escalar y siento una mezcla de miedo y cĆ³mplice cariƱo. Una mezcla de inseguridad y tremenda certeza de que no me dejarĆ” caer y eso le hace mĆ”s cercano a pesar de todo lo que inevitablemente en esta vida nos aleja.


19) MelancĆ³lica y ausente de mĆ­, desdoblada siempre entre la realidad y lo imaginario.


20) Lluvia fina, chocolate caliente bajo el techado. Intransigente, incapaz de estar en sociedad, incapaz del amor. No sĆ© dĆ³nde estĆ” el lĆ­mite entre respetar al otro y defender aquello en lo que creo… me siento poco guerrera, impregnada de esta sociedad hasta la mĆ©dula. Odio al mundo y me odio a mĆ­ por mi intolerancia.

21) Debilidad por las marquesinas, fotografƭo todas las que encuentro para un posible estudio que jamƔs harƩ. Esas manƭas que reconfortan.

22) Los sauces llorones abren un siniestro y bello camino hacia el acople en esa playa del norte, el mismo de cuando crecĆ­as dentro de mĆ­. Y las sardinas nos unen entre olas y rampas donde deslizarse en felices reencuentros.

23) Su imagen descalza, reciƩn duchada, en albornoz, regando las plantas al sol.

24) Llevo rato mirƔndolos, aquƭ tumbada, son dos y no sƩ si se pelean o juegan o se abrazan esos castaƱos gigantes movidos en el viento. Cierro los ojos y detrƔs de los pƔrpados el sol y la sombra de los Ɣrboles me llevan a realidades paralelas.

25) Hacer de jueza en un concurso de tortillas, acompaƱarla en su cigarro nocturno para hablar de todo y de nada y disfrutar de su compaƱƭa incondicional o ese pueblo okupa en el que sentimos que otras maneras de hacer la vida son posibles.

26) En la piscina veo las imĆ”genes de ese hombre que se casĆ³ con los pies sobre la mesa y ya no estĆ” y en sus ojos hĆŗmedos sobrevive y quiero que este momento nos sobreviva.

27) Paseo reciƩn levantada y me sorprende el rocƭo durmiendo en maravillosas telas de araƱa, como ayer mis dedos se sorprendƭan agarrando el sƭlex atrapado en la caliza o mis labios deslizados en tus labios.

28) En una terraza, convalecientes, las croquetas de cocido nos reconfortan a los tres, aunque sabemos que esta compaƱƭa es nuestra cura y como he leĆ­do hoy “un buen dĆ­a+un buen dĆ­a=una buena vida”.

Me cuesta hacer fotos o elegir instantes porque siento que desvirtĆŗo un momento dĆ”ndole peso en el futuro para fugarlo del presente, pero inevitablemente la mĆŗsica que suena o que resuena me mueve…

Con lerelelere te veo haciendo el payaso y ojos color sol me llevan al mundo que merece su gran oportunidad. Los garrapateros nos viajan a Chulilla, y resistirĆ© me trae tus lĆ”grimas de impotencia y emociĆ³n, y entre las cejas bailamos los tres libres de juicios en esa casa de vigas. Gracias a la vida a las lĆ”grimas de perdida. Y los titiriteros me llevan a una tarde en LavapiĆ©s, a mi madre… pueblos del mundo a una playa donde junto a los maitias le das otro aire al tema.

Y mientras pinchamos una canciĆ³n cada uno me trasporto vacĆ­a de objetos y materias…, a otras versiones de nosotros y a un futuro donde las mismas canciones me traerĆ”n a esta carretera de montaƱa con una luz que parece de otoƱo, una vida en movimiento y un viaje que, por suerte, nunca acaba.”