lunes, 24 de septiembre de 2018

vacaciones


















































































Almería es destino de emigrantes, porque se la juegan? Preguntan muchos, porque viene a España?, si aquí la cosas no anda muy para allá, pues viene por ejemplo porque allí, son esclavos. 
Nos cuenta Pérez de Tudela: 
¿Esclavitud en el siglo XX? 
Me quede perplejo cuando Badadi Mohamed Ali, jefe de la OJE del Sáhara, me acompañó en un largo viaje por aquellos territorios de la Saguia-el-Hanra y de Río de Oro, brindándome la emoción de ver un mundo pretérito, que yo estimaba completamente desaparecido… 
En aquellos años yo había viajado ya por distintos parajes del gran desierto, los célebres montes del Hoggar, esas increíbles formaciones volcánicas, lugares extraordinarios para la escalada... y varias regiones más de Mali y del Niger… 
Las montañas, las escaladas, las expediciones de alpinismo… que tanto nos han dado… emociones… nuevos sentidos de vida… también habían contribuido a nuestro desinterés por otros mundos, como aquél que aparecía ante mis ojos, cuando llegamos Badadi y yo a Bir Shgag, el famoso pozo… 
En Bir Shgag… varios hombres de aspecto remoto, estaban ocupados en sacar agua del pozo… Los hombres eran auténticos pobladores del desierto… descalzos… con las piernas desnudas y sudadas, a quiénes se les oían los gritos a los camellos, para que vinieran y para que se fueran… hombres con turbantes negros que nos miraban sonrientes… 
Badadi me dijo… -Mira… Mira… esos hombres y esas mujeres son esclavos… 
-¿Pero qué dices Badadi? esclavos a estas alturas del siglo XX… 
Badadi, descendiente de la tribu de los Erguibat, era hombre de dos mundos, ayer en una edad remota… se mostraba reservado… 
-Esto de la esclavitud es normal aquí- me contestó al fin… 
-En estos territorios hay más de 3.000 esclavos censados… y para no subvertir el orden social, España lo pacto así con los chejs… 
Las rutas negreras cruzaban el Sáhara en varios sentidos hasta bien entrado el siglo XIX… Se cambiaban todo tipo de quincallas, azúcar, telas… siendo la sal el producto principal, de las sebjas, las viejas lagunas desecadas… Seis losas de sal se cambiaban por una negrita bien formada de 15 años… y un negro joven, de unos 18, equivalía a cuatro losas de ochenta centímetros de largo… 
Existían dos clases de esclavos, los que nacían en las propias jaimas y no se vendían y los que se compraban… los hijos de esclavos eran esclavos… y frecuente ver como una mujer blanca, dueña de esclavos, amamantase a un niño negro de su esclava…Las jaimas eran las casas de todos, aunque el trabajo más duro, como el de sacar agua de los pozos, y las cansadas labores de pastoreo, solo era cometido de los servidores perpetuos… La riqueza se medía por la cantidad de cabras, camellos y esclavos… 
El Sáhara español, el “Sáhara Saharahui”, como me corrigió mi amigo Badadi, ha sido un país bíblico, una sociedad tribal de remotas costumbres, en donde el “mal de ojo” seguía presente… tal y como me decía el comandante Fernando Sanz, (padre del actor Jorge Sanz) con quien fui enviado por el diario ABC (Y mi perfil portada completa en color) para contar la vida de aquella región perdida, a pesar de encontrarse a menos de 200 kilómetros de las Islas Canarias… 
(De mi libro “Enviado Especial a la Aventura” de Ediciones Forja, Madrid 1980). 
 Si efectivamente el relato es de 1980, pero hoy en día existe, el año pasado la CNN, mientras hacia un reportaje en Libia, levanto una trama de venta de esclavos, 800 dólares por persona, bueno era una subasta...
Pero eso no es todo en el año 2018, 40,3 millones de personas están sometidas a la llamada esclavitud moderna, el 71% de las personas esclavizadas son mujeres y de ellas 15 millones viven en  un matrónimo forzado.
Al final mientras esto siga así, y más nos vale a los europeos que siga así, la inmigración será lo que es, la consecuencia de la desigualdad, pero para que nosotros podamos consumir tener nuestro ritmo de vida, tendrá que haber gente que no pueda consumir, es una pena, habrá que luchar para que estas desigualdades sean cada vez menores, pero bueno, esto es un problema de ahora, que dentro de unos años no existirá, porque en general sobraremos la mayoría de los humanos. Por lo visto mientras estuvimos visitando el sábado a mi tío, en Calabardina, llegó una patera a la playa de Elena, allí mismo, porque llegan allí? Tan arriba?, Porque salen de Tanger con el motor lleno de gasolina, pero cuando se acaba el combustible, van a la deriva, y si la deriva va de levante, pues llegan a estas costas Almería, Murcia… y si no, acaban por Italia, es decir que los pobres nisiquiera elijen destino. 
Vas subiendo desde Motril hacia el Cabo de Gata, y ves todo el mar de plástico desde antes de llegar a Ejido hasta, el propio pueblo de Calabardina, en Murcia, y te preguntas que pasará allí, debajo, esclavitud, prostitución, veías cuando estábamos cerca del Cabo cuando te desvías por la carretea hacia San José, los subsaharianos, en sus bicis antiguas yendo al trabajo, chabolas por todos los lados, y aldeas en los todos los letreros estaban en árabe… la verdad que entre el paisaje desolador, las personas que veías, te creíamos que estabas en Marruecos….El mundo cada día es más injusto. 
Por lo visto, en el pueblo de la Garrucha están las mejores gambas rojas del mundo... nos comenta Carmelo, el de los Gauchos, Ricardo el de Arzalia, que siempre veranea por Almería, nos dice que en las Negras hay un quiosco que se llama el manteca que hace un arroz prodigioso, no sé si nos acercaremos a alguno de los sitios vamos muy justos de pasta, ya veremos. 
Por otro lado, la tontería de los diésel, que le ha dado al gobierno, un diésel ni contamina más, ni menos que el gasolina, uno hecha un tipo de humo y otro, otro tipo, lo que pasa es que el del diésel es el que se queda en superficie, los que quedan feo en la foto los que provocan la boina, y por eso lo penalizan. La verdad es que todo contamina, todo deja su residuo, el problema, es que somos muchos consumiendo recursos y por eso la única forma es consumir un poco de todos, no mucho de uno, porque al final se acaba, si todo contamine porque no son procesos naturales... en fin, tonterías, si el problema es que somos muchos. 
La caída en las matriculaciones de vehículos diésel ha provocado que las emisiones medias de dióxido de carbono (CO2) procedentes de coches nuevos vendidos en España se sitúen en 116 gramos por kilómetro recorrido durante el primer semestre del año, dos gramos más que la media en el mismo periodo de 2017, según datos de la consultora MSI para la patronal de concesionarios, Faconauto. 
La organización atribuye el incremento de las emisiones al "trasvase de compradores que han optado por la gasolina", cuyas matriculaciones han crecido un 35% pese a que "los motores diésel emiten hasta un 20% menos de CO2". En este sentido, recuerda que la última generación de vehículos impulsados por gasóleo "es esencial para alcanzar los objetivos climáticos y la descarbonización del transporte en el futuro cercano". 
El hecho de que aumenten las emisiones prueba que "el debate que se está generando desde ámbitos sociales y políticos alrededor del diésel es poco realista, no responde a las demandas de los consumidores y acelera artificialmente su desaparición", a juicio del presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, para quien la raíz del problema es "un parque automovilístico antiguo y contaminante". 
Claro porque es antiguo y contaminante porque no tenemos dinero para comprar coches nuevos, no te jode!!!... 
En fin, el Alfred sí que va a dar el paso al gasolina con gas butano, un dacia no sé qué, que le van a tardar en dárselo 8 meses, el Chosi también lo está valorando, también en dacia, lógicamente porque en las demás marcas, son carísimos, yo por ahora paso, si se nos jode la doblo pillaremos una furgo de estas pequeñas diesel y que tenga unos años, con nuestra economía no podemos cambia a uno nuevo, y menos si estamos pensando en comprar una auto semi nueva. 
Ya antes de salir la Ana me modifico planes, quería dar una vuelta en Kayak por el Cabo de Gata, y empezó con sus miedos que si Alejandro es muy pequeño, que no lo ve, que no lo ve, y que nada, incluso llame para que me dijeran la edad mínima y no me pusieron problemas, y me quiere meter un parque temático, de esos, en fin, lo que tiene uno que aguantar. Eso es, lo que llaman las tías madurar, es decir, aprender a no hacer lo que quieres y encimar no protestar por ello. 
Siempre hay que lidiar con las circunstancias, los planes nunca salen, por eso Aníbal Smith, decía aquello de que me gusta que los planes salgan bien, porque nunca salen… 
Bueno, el viernes después de trabajar y cargar la auto con millones de cosas, salimos en el caracol, rumbo a Durcal, desde el 2007, que no vamos a Almería, la última vez, creo que fuimos en otra antigualla, en el Fiat  Uno de Ana, con 45 caballos, al menos han mejorado las carreteras desde entonces.
Temporal en Granada, y Almería, Tormenta, rayos truenos, mucha agua, llegamos a Granada y todo truenos, y bastante agua, así que la idea de pasar el sábado escalando y luego ir el domingo para Almería con Raúl, para ir con la canoa, se jodió, pero bueno, estuvimos muy a gusto con ellos, el domingo sí que nos preparamos para ir y en esos momentos, les llamaron porque un familiar se había muerto en Sevilla, así que se tuvieron que ir para allá, así que nos fuimos para el Cabo de Gata, cambiamos San José y Monsul, por la Isleta del Moro como campo base, ya que San José tiene ya demasiado turismo, se ha ido de madre todo aquello, caro demasiado grande, La isleta en cambio, es un pueblo encantador pequeñito todavía no asolado por el turismo, y con un sitio excepcional para plantarte con tu furgo o auto y pasar allí unos días cojonudos, aun así, estuvimos una tarde noche en Monsul, para recordar viejos tiempos y después bajamos al pueblo, dar una vuelta por el paseo marítimo hasta el puerto y en el cucurucho tomar unas cerves a San José, y a la mañana siguiente en Genoveses, donde aproveche, mi única escapada a dar una vuelta en bici por ese medio desierto y esas calas inaccesibles. Eso sí, las aguas cristalinas, y la ruta interesante aunque más del 50% no ciclable, entre las piedras enormes y si no la arena, se hizo complicado aso si muy curioso pedalear por allí, en Calabardina había un paisaje parecido, vi un camino desde los repetidores pasado la aldea de Francisco Rabal, para mi gusto junto con Fernando Fernán Gómez, los mejores actores españoles, hasta las rambla que desemboca en la playa, un camino muy bonito para la bici… Las temperaturas infernales a las que nos enfrentamos en la Región, Murcia que bonita eres, desde hace semanas sobre todo con el 90% de humedad, no sé cómo mis tíos aguantan allí todo el año, es un horror creo que durante la noche del sábado al domingo conseguimos dormir Ana y yo una hora, que horror de lugar, claro desde el mar, porque dimos una vuelta por allí en el barco de mi tío, una vuelta desde el puerto de Águilas, girando por la isla de los Frailes, después de atravesar el cabo Cope, para llegar hasta la torre desde allí, se divisa Mazarrón, y es muy curioso no hay pueblo y casi no hay casas desde Calabardina hasta Mazarrón, es zona de agricultura, intensiva, sin embargo por toda la costa de Águilas, las urbanizaciones ilegales, se suceden, metidas en las rocas, y en toda la costa que no hay ni 5 metros, se pasan por el forro de los cojones la ley de costas, son un horror, no aprendemos. En la vuelta en barco nos enseñó donde pesca él, donde tuvo el percance buceando, donde tiene las escuelas de buzo, hundidos lo barcos, la piscifactoría que había, la roca del águila, que seguramente, Águilas se llame así por esa roca, el embarcadero del Hornillo, donde llegan los barcos de vapor para recoger el esparto y el carbón, muy curios el sitio, se nota porque tiene un murallón de montañas que los separa del resto del mundo por allí, no pasa ni las tormentas ni el aire… En la Cuesta de Gos, aldea aguileña en la que nació, el 8 de marzo de 1926, y vivió de niño el insigne actor Paco Rabal. Y es junto a la ermita de esta población de tradición minera, y hoy habitada por una escasa treintena de personas, bajo el almendro que dio sombra a sus cenizas y que fue escogido por el ilustre aguileño (hoy reposan en el cementerio de Águilas por expreso deseo de su esposa, Asunción Balaguer) permanece su recuerdo hecho metal en una escultura que lo muestra tranquilamente sentado, mirando al horizonte, hacia las laderas que albergaron las minas y las instalaciones en las que su padre ganó el pan para la saga Rabal, antes de que el cierre le obligara a emigrar a Madrid. 
En su memoria y la de los tiempos que lo vieron crecer, cruzamos la rambla de la Cuesta de Gos y recorremos la pequeña aldea. Un vecino recoge los frutos de los manzanos de la Cuesta de Gos, una variedad autóctona de pequeñas pero abundantes, verdes y sabrosas manzanas. «¿Quieres una?, se están cayendo», ofrece amable un vecino, que recuerda que la casa de la familia Rabal estaba ladera arriba de los Lomos de Pinilla, «pero ya no existe, quedan unas ruinas», explica. 
Olivos, higueras, viñas, almendros, algarrobos, granados, hinojos y tapeneras, ahora con sus exuberantes flores abiertas, alimentaron a los habitantes de este núcleo rural y hoy van saliendo al paso, asilvestrados, en estas tierras despobladas, en las que abundan los pozos mineros y las bocaminas ahora selladas para evitar accidentes. Una enorme carrasca descolla junto a las ruinas de una antigua casa que, como todas las demás, tuvo horno moruno para hacer autosuficientes a los moradores de estas tierras de labor apartadas del mundanal ruido. 
Estuvimos visitando el pueblo de Rodalquilar, el antiguo pueblo minero, La mina de Oro, el Jardín Botánico del Abardinal, que recibe su nombre de una planta muy frecuente en el entorno: el albardín. Un buen ejemplo de la adaptación de la naturaleza a zonas áridas y con altas concentraciones de sal en el suelo como las de esta comarca. Y que es una de las especies más utilizadas tradicionalmente por los habitantes de la comarca de Níjar para usos similares al esparto, planta de características parecidas con sus explicaciones sobre los ecosistemas desérticos, muy curioso, y luego comimos, mientras tronaba en una tasca a pie de carretera que parecía la típica tasca Mexicana perdida en el desierto, el tío un hippie pasado, quizás estoy yo mas pasado, si me hubiera fumado unos porros, pero al final no pude quedar con Kiko y no lleve nada, eso sí, con mi pelo y mis barbas de no lavarme en 7 días, ni cambiarme de ropa, solo bañador y camiseta de los Clash, bueno, como todos sus clientes, nos calló de puta madre, y nos trató también de cojones, y la comida muy buena, platos exóticos y de diferentes culturas como hummus árabe o unas quesadillas mejicanas y luego una margarita buena, guena, la taberna del Faro, se llamaba, con su bandera pirata y todo, muy recomendable, después nos desplazamos al playazo, nos encantó esa zona, nos dimos una vuelta en bici por allí, hasta la fortaleza, y nos bañamos en una cala como antaño, todos en pelotas… 
En el área de Rodalquilar existen unos yacimientos minerales que han sido explotados económicamente desde hace tiempo. Por la minería de Rodalquilar han pasado pequeñas empresas locales, empresas nacionales tanto privadas como públicas, multinacionales mineras e incluso la Corona de España en el siglo XVI, alternándose ciclos de gran actividad con otros de baja, todo ello motivado por diferentes factores políticos, militares, económicos, sociales e incluso especulativos. 
La importancia de sus minas ha variado con el paso del tiempo; desde jugar un papel estratégico destacado en el mercado de los alumbres europeos en el siglo XVI, hasta otro de carácter social local en la etapa de la minería pública aurífera a mediados del siglo XX. 
La presencia de una rica geología económica y de una actividad minera continuada para explotarla han interactuado durante cientos de años con el medio biótico, dando como resultado final un paisaje cultural (en terminología UNESCO) que actualmente se encuentra reconocido mediante diferentes figuras. A nivel nacional, con la declaración del Parque Natural Marítimo- Terrestre de Cabo de Gata-Níjar (1987), y con la declaración, por parte de la UNESCO, de la Reserva de la Biosfera de Cabo de Gata-Níjar (1997) y la declaración del Geoparque Europeo de Cabo de Gata-Níjar (2006), a nivel internacional. Pero aún queda por reconocer y poner en valor su destacado patrimonio minero. 
El rico patrimonio geológico existente en Rodalquilar ha sido explotado económicamente a lo largo de los siglos mediante la minería y ha generado un rico patrimonio minero. Los afloramientos geológicos existentes y los restos mineros presentes sobre el terreno, junto con la documentación generada por las investigaciones desarrolladas en las últimas décadas sobre ambos patrimonios, son una base sólida para la puesta en valor de ellos y para intentar lograr un desarrollo económico sostenible en Rodalquilar, por ejemplo mediante el turismo activo o mediante el turismo cultural. 
Nos visitaron unos amigos de Madrid de Raúl, más concretamente de Fuentidueña del Tajo, que también tienen allí un paisaje muy desértico, no me extraña que les guste tanto Almería, una pareja muy maja, ella 64 años el 48, muy bien avenidos se les notaba que se querían, llegaron con una vw carabelle, muy larga y totalmente camperizada, pero la idea que tienen es pillarse una l2h2, porque a la mujer le queda poco de estar en buenas condiciones, tuvo un accidente en coche y se ha quedado muy tocada, de hecho, aunque no lo vimos llevaban una silla de ruedas, y quieren aprovechar mientras ella esté bien, para viajar, él es diseñador gráfico, autónomo funciona muy bien, sobre todo trabaja para muchos ayuntamientos, y quiere contratar a alguien y él llevar lo justo con el portátil y el móvil, y alquilar su casa, y a viajar hasta que el cuerpo aguante, no es mal plan, mi tío también se lo está pensando, vender el barco, la moto, pillar una auto y a viajar…Luego por la noche vino Raúl con la intención de ir a escalar y luego a hacer algo de Kayak porque se trajo su canoa , pero con su amigos aquí, no fuimos a escalar, la verdad que si nos fijamos de la guía de escalada de Andalucía, de David Munilla, no hay dónde escalar en Almería, pero Óscar, me dijo que al lado de Habla el pueblo de Manuela se escalaba, y Raúl conoce un sector al lado de Almería ciudad. Estuvimos departiendo, bueno sobre todo Raúl y su amigo como rajaban los dos, un par de vueltas en el Kayak, al niño le gustó mucho el tema de la canoa. Además, milagrosamente, no volcamos ni una sola vez, también me sorprendió la rapidez con la que avanzábamos. para cenar y desayunar teníamos una vista increíble, la isleta y más allá de los Escullos si levantabas la vista por encima del blanco del pueblo, se alzaban dos extintos volcanes gemelos como dos pechos turgentes .Estos dos cerros, denominados “El Fraile” y “El Fraile Chico”, fueron posiblemente en origen un volcán central con dos domos (formas volcánicas generadas por la salida muy lenta de lavas muy viscosas que se acumulan entorno a la boca eruptiva), compuestos por andesitas basálticas (rocas más básicas del Cabo de Gata) de color oscuro formadas hace 8 millones de años (m.a). Se generaron sobre un extenso campo de domos dispersos de andesitas anfibolíticas y dacitas, formadas hace entre 10 y 12 m.a, actualmente muy erosionados y alterados. Sobre estos materiales volcánicos antiguos se instalaron niveles sedimentarios marinos con diverso contenido fósil, depositados hace entre 8 y 10 m.a., indicativos del cese temporal de la actividad volcánica, para posteriormente generarse ambos domos que actualmente observamos, y que posiblemente constituyeron una isla volcánica durante su formación. El cerro de “El Fraile” constituye el punto más alto de la Sierra de Cabo de Gata, con una altitud de 493 metros. 
Por la noche era todo tranquilidad, los furgoneteros se acostaban pronto, Ana también el niño se quedaba dormido a mi lado hasta que se dormía, viendo la luna yo mientras leía un libro de desnivel, que parece para público adolescente femenino, una chica que se obsesiona con una vía bastante fácil, placa más fisura de v+, y mientras ella está obsesionada no le presta atención a la gente que la rodea y la quiere y ella ignora y por eso se alejan de ella, bueno por ahí voy leyendo, se titula cartografías nómadas. La idea era haberme llevado el nuevo de Simón Elías, (Las ventajas de ser antipático) pero hasta octubre no sale a la venta. Una de las mañanas se nos acerca una Citroën C15, se baja el paisano vestido como la gente de pueblo de toda la vida y la mujer todo fashion, y nos ofrecen a todos los que estamos allí acampados verduras, hortalizas, frutas... y como no, pillamos tomates, tomillo, zanahorias, almendras, luego también en Calabardina, mi tío nos dio tomates del Señor Miguel, uno de los grandes de la zona que tiene mazo hectáreas de invernaderos, con tomates y también planta lechugas, esas no se pueden tener en invernaderos, nos estuvo enseñando uno de esos mastodónticos sitios, muy curioso de ver...
La verdad, que se pasó casi todo el tiempo en el agua no salía ni a tiros, pero con lo que más ha flipado y mira que a mí no me hacen gracia, ha sido con los perros con los de Raúl sus dos gran daneses, el mastín y la pati y además el que les dejo ese finde Yamil, luego los de los amigos de Raúl, un comer y un determinado, los dos capados, no veas lo que he aprendido de perros, que si tienen artritis, que si al final, lo mejor son los chuchos, luego el de mi tío, y para acabar con las fotos del cachorro de mastín que le han regalado a Raúl, la verdad que él lo ha flipado pero yo he acabado un poco hasta los eggs… En honor a la verdad, he de agradecer las visitas, porque sin ellas, seguramente que me hubiera tocado hace muchos más castillos en la arena, y eso que este año no he hecho muchos, mientras la Ana descansaba tumbada al sol, el niño y yo jugábamos casi todo el tiempo con las Olas, olas, salitre y arena, en fin, con la mini tabla de surf de rayo McQueen, que le encantó coger las olas, eso sí, tumbado, y con la pelota a jugar a “paradones”, la tirábamos a las olas, el balón esperaba donde rompen y nos lo devolvía con fuerza instante que el niño intentaba parar la pelota entrenaba para parar como portero, luego él decía, tengo que recargar la batería que me queda el 5% y volvía a los 5 minutos diciendo ya está al mil, tampoco fuimos a los Padules, ni comimos gambas rojas, ni el arroz en el manteca, pero en general, a parte de la lluvia, la sal, la arena, lo pasamos bien. Desde Granada a Almería, todas las chumberas que vimos estaban chungas una enfermedad que tenía, una pena. Yoli decía que era de unas cochinillas, pero Raúl dice que tiene que ver con el carmín, que sacan de allí y que a lo mejor no interesa a mucha gente. Uno de los días nos acercamos al desierto de Tabernes, al norte de la ciudad de Almería se encuentra esta árida llanura compuesta de cárcavas, ramblas, torrenteras y taludes propias de los paisajes badlands. Se trata del desierto de Tabernas, conocido por haber servido de escenario a numerosas películas de spaghetti western durante la década de los 60 y 70. También por ser uno de los mejores lugares de la zona para el avistamiento de aves ya que está protegida para que estos animales puedan refugiarse en él. Entre ellos se pueden ver el vencejo real, el solitario o la granjilla, además de algunos mamíferos como el zorro, el lirón o el conejo. Si me engaño la Ana para ir al mini Hollywood, zoo y lo que quieras, allí había de todo, actuaciones del oeste, tenían una colección interesante de cámaras de cine, piscina, restaurante, zoo, la atracción principal los cocodrilos del Nilo, aunque lo primero que te encontrabas era un pedazo de tigre… bastante curioso como utilizaban algunas cárcavas para delimitar la zona de los animales, no quedaban mal de todo los animales, aunque un zoo, siempre será un zoo, el fracaso del hombre para convivir con la naturaleza, aunque, sí que es verdad, que es el futuro de muchas especies al ritmo que vamos… 
Y antes de subir para Murcia que bonita eres, nos quitamos kilómetros, y fuimos a parar por arte de birlí biloque, a Palomares, sí señor, donde se bañó Fraga para demostrar que aquello no estaba contaminado, menos mal que nosotros no son bañamos, solo nos quedamos en el camping, acompañados eso si de un montón de guiris, bañándonos en la piscina, poniendo lavadoras, vaciando depósitos...
Que por cierto al lado está el pueblo de las gambas, estarán tan buenas porque han mutado? Y las playas de la zona, no las llaman de Palomares sino de Vera para disimular… con un poco de suerte el año que viene no piso la playa. 
Javier Egea vivio en la Isleta del Moro: 
“Lo que pueda contaros…” 
Lo que pueda contaros
es todo lo que sé desde el dolor
y eso nunca se inventa. 
Porque llegar aquí fue una larga sentina,
un extraño viaje,
una curva de sangre sobre el río,
mientras todo era un grito
y ya se perfilaba resuelto en latigazos
el crepúsculo. 
Las historias se cuentan con los ojos del frío
y algún sabor a sal y paso a paso
─lengua y camino─
porque la sangre se nos va despacio,
sin borbotón apenas,
desmadejadamente por los labios. 
Las historias se cuentan una vez y se pierden. 
Javier Egea