domingo, 26 de abril de 2020

Aquí resistiendo


LA CASA DE UP DEL CARLITOS






SIERRA NEVADA 1 DE ABRIL
 


SIERRA NEVADA 1 DE ABRIL


LA MALICIOSA 1 DE ABRIL



































































 

CENA NAVIDAD 2009



PARIS 1992
 

DISNELLANDIA 1990

PARIS 1992


PARIS 1992

DISNELLANDIA 1990
 


 














Bueno, seguimos confinados, más de 40 días, y millones de noches, ya en casa con la familia, que no lo llevan mal, Alejandro se cree que son vacaciones y eso que hace deberes y Ana como teletrabaja y no tiene que aguantar a su jefa no lo lleva mal.




Montones de wasap de llamadas telefónicas, video llamadas, te hacen más ameno esta pesadilla, retos entre los miembros de la familia, que si el de la harina, de numerosos bailes, el de la zapatilla, en fin inventos, para no volverse loco y engañar al coco para que parezca que estamos todos juntos, aunque ya estemos medio locos.




El Dani nos pasó una aplicación para el ordenador, para ayudar a hacer una vacuna contra el virus, te mandan un cacho de algo para que tu pc haga cálculos y lo tienes todo el día hay calculando, probabilidades para romper no se qué, de la proteína del virus, en fin algo que no entiendo, cuando acabas ese cálculo te mandan otro, nosotros, El Dani, Alfred , Pedro y yo, vamos con grupo “pal pino” aquella vía mítica que hicimos en Peñalara donde el Dani casi se queda sin manos de la congelación.




En general nos hemos vuelto todos más nostálgicos, el grupo de los gauchos todo el día mandando fotos viejunas,, llama gente que hace tiempo no hablabas y nos hablamos con un tono como si nos echamos de menos y siempre te despides diciendo cuando acabe esto vamos a hacer esto y lo de más allá...




Anoche estuve 3 horas nocturnas mientas se tomaban cubatas y haciendo porros con Raúl el Luis desde su aldea y el Bece que por cierto va a ser padre, el Raúl estaba nostálgico empezó a ver fotos de los viñas y nos llamó tuvimos una videoconferencia donde estuvimos partiéndonos la polla un buen rato, faltó e lnsu.




Me llaman casi todas las semanas, mi tío Luis, de Galicia mi primo mi primo isra la verdad un invento la tecnología pero yo con esto me despisto mucho sigue sin gustarle lo de hablar por teléfono no le cojo el tranquilo. Me llama el Carlitos que está con sus legos y haciendo la casa de la película Up.




Ahora, en un rato, conectamos con cesar Elena, Rosa, Tere, Alfred Silvia, Pedro, Dani para compartir aperitivo...




En general, desde que volví a casa el tiempo ha vuelto a pasar en un suspiro va a toda velocidad otra vez entre el trabajo la gimnasia el jugar con el niño casi no hay tiempo para nada ni para leer, ya casi no veo documenta tele y el otro día le trajo el Bb, después del trabajo unos libros sobre todo el de Evaristo que le tenía muchas ganas y todavía no he empezado, muchas gracias Bb.




Ya no soy el mismo, he cambiado la montaña por paseos en un pasillo, la. Cerveza por la nostalgia, sigo sin beber, ni siquiera café, en el trabajo me siento súper inseguro con miedo cuando me llaman los clientes, lo único que no ha cambiado son mis ganas de abandonar Madrid.




Ya queda menos a ver qué nos depara el futuro...




Los tíos de Ana, amador y Agustín siguen en el hospital graves esperemos que se recuperen pronto nos tienen en vilo.




Que felices son las montañas sin el ser humano....a lo mejor nos toca extinguir nos.




Por no hablar de los políticos todos los gobiernos en general están haciendo las cosas fatal, improvisando, cuando la gente se les echa encima, rectificando, el gobierno español no es menos se ha equivocado mucho, pero a diferencia de otros países en vez de remar todos los partidos políticos en la misma dirección para salir de esta aquí la oposición machaca al gobierno genera un clima de crispación y no ayuda nada a salir de esta crisis de mierda, en fin gentuza




El Alfred también está nostálgico se puso a leer el. Blog y vio que faltaban muchos años así que estoy volviendo a publicarlos, pero se han borrado fotos no sé porque. En fin la vida continúa... Los días son más largos se nota otra temperatura, los animales han reconquistado territorios, ha llovido en este mes de abril, que a nosotros nos lo han quitado pero a la vida no, más que nunca...




Nos ameniza la tristeza y la nostalgia el Robe




YO ME QUEDO CONTIGO AQUÍ



El mundo ahora parece detenido

y ya no gira como tiene que girar,

y yo, para encontrar el norte, miro

en busca de una estrella fugaz.



Y tú como si no fuera contigo.

Qué pena, qué pena,

qué penita que te tengas que marchar,

que no puedes llegar tarde a la cita

que tienes con la Estrella Polar.



Que el mundo gira y gira sin sentido,

descontrolados,

nos lleva en el espacio, fugitivos,

de lado a lado,

y avanza lentamente al infinito,

y yo... yo me quedo contigo aquí,



que el tiempo pasa siempre a nuestro lado

y, ay, ahí no se queda.

Y "ahora" se ha convertido en "pasado"

y no nos espera

y cabalga desbocado al infinito,

y yo... yo me quedo contigo aquí.





Hay cosas que la vida no permite.



.



Vigilar el futuro en la distancia



añorando los sueños.



Sí en cambio desear lo que es huida,



como un viento de octubre



tras sus hojas de estío,



encender los rescoldos de la lumbre,



avivar el pasado



y entender los matices



que descuelgan un beso



sin retorno en la orilla.



.



Otras son pintar con tonos pálidos



la risa, o habitar un arcoíris



una lágrima turbia



insensible en el rostro



que se arruga en los años.



.



No dejan, sin embargo, los matices,



pulir la marca oscura en el espejo,



perder la timidez en ese tránsito



cuando enviuda la muerte en las exequias



porque somos presencias de lo vivo,



y ya saben los mármoles los bustos



que depara el invierno



despiadado y tangible.



.



Hay cosas que creemos hoy prohibidas



y puede que más tarde comprendiéramos.



.



Correr en aeropuertos del deseo



en pos del rostro amado;



quizás porque el amor nunca está a salvo



de un éxodo de nubes vespertinas.



.



O mostrarse indolente ante la lluvia,



pues no es sólo una gota en la mejilla



oportuno arrebato melancólico.





Es mirar a través de un vidrio opaco



donde enfrentan los grises su luz última,



el ahogado barniz de los asfaltos



y sus mares de gente



sin paraguas de vida...



De Este Abril, distinta lluvia (Premium, 2018)



EL TURRON NOS CANTA



Diosecito



Dónde estabas entonces, cuando encima la mierda cayó,
kamikaze querido, aquí vengo yo.
Dame un solo motivo, el papel donde debo firmar,
una vida entera dedicado a bailar.
Cascabeles colgados, camiseta de «no pasarán»
pedacito de cielo, no te quedes atrás.



diosecito déjame como estoy, no me cambio por nadie
diosecito déjame como estoy, no me cambio por nadie
diosecito déjame como estoy, no me cambio ni por ti



Cómo suena el deseo, cuando al suelo lo dejas caer,
donde irán los trocitos, quién recoge a quién.
Vence el aburrimiento, la promesa de echar a volar,
los licores que chocan, brindando a matar.
Borrachito perdido, un bostezo de la libertad,
el poema que Lorca no logró terminar.

 

REFREXIONES DEL BABAS:



Me preguntaron que por qué no había escrito o colgado nada de opinión o reflexión en estos días de confinamiento. No supe qué responder. Nada que decir, supongo. Asumí el encierro y he estado observando. Me he comido un plato fuerte de erte con guarnición a la rica reclusión y de postre un futuro incierto.


Al principio veía, leía y escuchaba las noticias. Los centenares de muertos de cada día. El sistema sanitario desbordado. Las medidas del confinamiento. Que se acaba el papel higiénico. Después, todo me superó o me aburrió, y hace semanas que no sigo noticieros de ningún tipo. Remendero a tus remiendos: así que a mis textos y mis canciones. Me va a faltar confinamiento para todo lo que quisiera escribir y cantar. Me entero de lo que pasa por ahí por los cuatro grupos de wasap de amigos (Bustar, Hortaleza, Vallecas & co, Málaga & co) que me tienen al día de memes, colapsos, mentidos y desmentidos… No hallé ninguna certeza, no encontré solución a ninguno de los acertijos.



Me he ido enterando de la muerte de los padres de varios colegas, en un número bastante superior al normal. Y de todos los que se han ido quedando con una mano delante y otra detrás, también en número bastante superior al normal. He oído que el presidente más poderoso del planeta, Trump, quería chutar lejía para matar el bicho, no me ha sorprendido en absoluto, muy en su línea. Y que aquí, los del trifachito, están erre que erre queriendo hacer leña del árbol herido, tampoco me ha sorprendido ni una miaja su temple cainita, tiemblo de pensar qué hubiese sido de nosotras de haber estado ellos en el poder. Supe que el rey se visitó de jefe militar y que por carta reconocía que su padre tangaba inmensas cantidades de dinero y que él lo sabía, en verdad nada sorprendente: lo sabíamos todas.



He visto fotos de animales por vías urbanas de cielos impolutos. Conocí una palabra nueva: distopía, que no describía una serie futura y apocalíptica, sino la realidad cotidiana. He visto videos de policías pegando a gente que al parecer se estaba saltando el confinamiento y otros de policías poniendo las sirenas como forma de alegrarle el balconing al personal. He visto videos de gente cantando en sus balcones y otros de gente haciendo de policía política desde sus balcones. He visto una solidaridad tremenda en ciertas personas y colectivos, los que generalmente ya lo venían practicando de antes. He visto convocar y desconvocar aplausos y caceroladas por las más diversas causas, predominando el agradecimiento a los sanitarios y la súplica de que no se siga desmantelando la Sanidad Pública. He sentido las ganas inmensas que tiene la peña de echar una cerveza y darse un abrazo.



Si me preguntan si confío en que de esto la humanidad sacará una lección, mi respuesta es que lo dudo: el neoliberalismo que llevamos inoculado nos exige ir de crisis en crisis hasta el colapso final y mientras tanto, seguiremos consumiendo ingentes cantidades de vida con obsolescencia programada. Si me preguntan qué conclusión saco de todo esto, creo que, como ya canté en una canción, cuando me miro las manos, no tengo nada que ofrecer.



Kike Babas. 26/04/20.